Hace años tuve la suerte de cruzarme en mi camino a Ovideo, un transportista de Tarragona padre de un joven chaval el cual realizo su primer trabajo como maquinista autónomo, para por aquel entonces mi empresa.
Apenas acabados sus estudios y el hijo de Ovidio se convirtió en un excelente trabajador. Gran persona ese chaval que de forma honesta se ganaba la vida y alegría de sus padres por ser persona sana, leal con sus amigos.
Como la vida no es todo lo justa que debiera al pobre pequeño ovideo su salud le traiciono y la mala suerte le arrebato la vida a muy temprana edad. dejo mujer he hijo, dejo desolación entre sus seres queridos.
Hoy en la Casa de Pinel y aquí en la Voz Del Ciudadano, queremos dar voz a su madre que mediante este vídeo, le rinde homenaje. Hoy en la Voz Del Ciudadano queremos decirte pequeño Ovideo, que no te olvidamos y que algún día nuestros caminos volverán a cruzarse, hasta luego Ovideo...