Estas parecen ser las teorías de los seudocientíficos historiadores del subvencionado Institut Nova Historia. Bilbeny, Cucurull, Mayolas, Guillot. Además de su fobia castellana demuestran de esta manera al mundo la superioridad de su recién creada “Raza Aria” catalana a o largo de la historia.
Sus perlas subvencionas y apoyadas por los más fanáticos políticos catalanes son además transmitidas a los cuatro vientos en sus mitines y sobre todo la televisión pública catalana pagada por todos TV3:
-Castilla no tenía historia ni cultura relevante. La necesitaban y cogieron las nuestras (Jordi Bilbeny).
-Castilla ha tenido la fortuna de ser la vencedora y se dota de un pasado que no tenía. Su intolerancia es casi genética (Pep Mayolas).
-Es materialmente imposible que una gente que no tenía los instrumentos necesarios para navegar y guiarse por los mares (Reino de Castilla y León) pudiese llegar donde dicen los libros que llegó, al otro lado del Atlántico (Jordi Bilbeny).
-Castilla no tenía banqueros (Pep Mayolas).
-¿Qué tradición marítima acumularon los castellanos entre los siglos XIII y XVI?.Se ha podido demostrar la escasa potencialidad científica de la nación castellana para llevar a término una hazaña marítima que estaba muy por encima de su alcance (Enric Guillot). (Sobre el descubrimiento y colonización de América)
-Esta empresa se hace en Cataluña. No en Sevilla ni en todos esos lugares estrambóticos que dicen ellos (Victor Cucurull). (También sobre el descubrimiento y colonización de América)
-En realidad el imperio de Carlos I era el imperio catalán más Castilla, pero los libros han adulterado la historia (Jordi Bilbeny).
-En Castilla no tienen, ni tenían tradición literaria (Jordi Bilbeny).
-Da Vinci no era italiano ni se llamaba Leonardo, la Gioconda la pintó con el paisaje de Montserrat a sus espaldas.(J.L.Espejo-Bilbeny-Cucurull).
-Roma no era nada, y Roma no empezó a ser la capital que es hasta el día que en ella entraron los catalanes (Víctor Cucurull).
- El descubridor de America fue en realidad Joan Colom i Bertran, nieto del fundador del primer banco público del mundo y antepasado directo del actual presidente de la Generalitat, Artur Mas(Jordi Bilbeny).
Todos ellos al unísono, llegan a afirmar que Marco Polo fue un personaje de ficción, mientras que el verdadero viajero del siglo XIII fue Jaume Alarich, catalán para más señas, aunque en esta ocasión “de Perpinyà”, o sea, de la “Catalunya Nord”.
Pep Mayola,el cual parece tener un carnet de investigador o una “etiqueta de Anís del Mono” como titulación de investigador (no consta ninguna licenciatura universitaria suya), asegura en sus conclusiones sobre Erasmo de Rotterdam, que ni se llamaba Erasmo ni era de Rotterdam: en realidad, según Mayolas, era el segundo hijo de Cristóbal Colón y era catalán, de nombre Ferran. Parece ser pues, que mi erudito admirado el cual visité no hace mucho en su reposo eterno en la catedral de Basilea (Suiza), no era más que un convecino mio nacido siglos antes en algún lugar de Catalunya.
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=937636182952086&set=a.691227227592984.1073741837.100001171407174&type=3&theater
Cucurull afirma que los orígenes de la “nación catalana” se remontan al siglo VII antes de Cristo y que esta fue “la primera nación del mundo”. No sólo eso: en el siglo XI ya constituyó una Sociedad de Naciones, muy adelantada a la Sociedad de Naciones del siglo XX que daría lugar a la ONU. No se queda ahí: “Era un proyecto político de una madurez, una modernidad, una radicalidad democrática tal que hizo que los catalanes de finales del siglo XV fuesen tan importantes en aquel momento como lo han sido en la segunda mitad del siglo XX los Estados Unidos de Norteamérica. Aquí tenéis las perlas resumidas del sujeto para el que no crea que la estupidez de estos tipos no existe:
Según este fanático, miembro además de ANC, Américo Vespucio, no existió: en realidad, se llamaba Aymerich Despuig y era el cosmógrafo de Colón. Catalán, claro.
La guinda de estos despropósitos la sostiene un tocayo, apoyado por los otros dos falsos eruditos sobre el importante personaje histórico Leonardo da Vinci: en el blasón de su familia hay un escudo con tres rayas rojas verticales. El historiador José Luis Espejo sostiene que Leonardo puede provenir de una familia catalana y que estuvo al menos dos veces en Cataluña. Fundamenta su hipótesis en que el escudo es idéntico al de Mallorca, “así como en el hecho de que es la villa de Vinçà, tal vez el topónimo que dio pie a su apellido”. Además, apunta a que el apellido Vinçà es muy común en Cataluña y que durante más de un año se recluyó en Montserrat, donde supuestamente estudió alquimia y pintó dos cuadros. Porque, asegura, “la alquimia nació en Cataluña”. Espejo incluso llega a afirmar que la sonrisa de La Gioconda es la de la Virgen de Montserrat y que esta montaña aparece en el fondo del cuadro.
No cabe ya duda de que remitiéndome a mis palabras iniciales o título de este artículo:
los catalanes siempre fuimos los más listos de la historia...
Lo penoso de todo ello, es que aunque no falten motivos y orgullo para ello, los estamentos a los que dedicamos nuestros impuestos estén subvencionando estas barbaridades que no hacen más que causar risas y sorpresa en la comunidad internacional.
Como probablemente sospecharán ustedes (si no están abducidos por las paranoias de estos personajes), el apoyo político se traduce automáticamente en apoyo económico por parte de la Generalitat a estas asociaciones. No soy yo el más indicado para practicar una auditoría de las cuentas del I.N.H, pero basta echar una ojeada a la anterior imagen con los logos de los mecenas de uno de sus cursos, para comprobar que, nada menos que cuatro instituciones públicas riegan con dinero igualmente público el sarao de estos individuos: una diputación provincial, tres ayuntamientos y un consejo comarcal. Y no hace falta ser muy agudo para deducir que el resto de los patrocinadores, (todos ellos fundaciones y asociaciones), también reciben con toda probabilidad su correspondiente tajada de dinero del contribuyente en forma de subvenciones. Así cualquiera se puede meter a historiador revisionista, catedrático o teólogo...Pero lamentablemente o afortunadamente dentro de la gente que ama, estudia y revisa la historia también existe la decencia, la honestidad y la cordura.
J.L.N.G “El Eco de la Historia”. 17 Marzo 2014.
Además de lo anteriormente narrado, en Catalunya, los independentistas reproducen una infame estadística del reparto de votos, según el nivel de estudios. Según una estadística hecha por encargo poco antes de las pasadas elecciones catalanas, se deduciría que:
%Votantes sin ESO- Votants sense ESO-
PSC:18
C´s: 17
PP: 16
CIU: 10
ICV: 5
ERC: 3,5
CUP: 1
Afirman que la mayoría de catalanes con estudios superiores votan a partidos indepes (CiU, ERC, CUP...).
Y aseguran que la mayoría de catalanes con pocos estudios (o ninguno), votan a partidos no-nacionalistas (PSC, PP, Ciutadans...).
La conclusión, es evidente: ser indepe es propio de'inteligentes'. No serlo, es propio de 'tontos'.
Además de representar una patraña indigna y absurda, creo que podríamos establecer otro tipo de estadísticas igual de paranoicas:
De entre todos los fumadores de porros en Catalunya...., ¿cuantos votan a la CUP, por ejemplo?. Me parece que sería un % muy elevado.
¿Significa eso que los votantes de la CUP, por regla general, son porreros?
No, y además, sería insultante.
¿Cuantos evasores de capitales catalanes votan a CiU...?
En mi opinión, los indepes tratan de estigmatizar a los catalanes que votan a partidos no-nacionalistas: sois tontos, fracasados, trabajadores poco cualificados, y nunca habéis pisado una universidad.
De esto se trata.
Ellos son los listos, triunfadores, inteligentes, y por encima de todo, los prepotentes y clasistas. Esa es su única realidad.